Lo digo porque en el BOE de ayer (pinchad aquí y aquí) se publicaban sendos anuncios de licitaciones públicas y adjudicaciones para comprar ordenadores de sobremesa y portátiles y servicios conexos (digo yo que impresoras y esas cosas) por importe de 895.620 euros y para suministro de equipos, software y servicios conexos para la renovación de la seguridad perimetral del sistema informático del Senado por importe de otros 154.580 euros.
Y yo, que llevo sin toner en la impresora para ahorrar más de dos años, me pregunto si procede, en los tiempos que corren, y con las Cortes disueltas, gastarse esa pasta, que para lo que hacen algunos/as en el Senado les bastaba con una libreta y un boli; bueno y un dedil para apretar el botón en las votaciones sin romperse las uñas.
Claro que nada comparado con los cursos de idiomas para el Ministerio de Fomento que también salen a licitación en el mismo BOE con una base de licitación de casi un millón de euros y un valor estimado del contrato de casi dos millones. Mira que con mi título de inglés les doy clase a todo lo que me manden con que me triplicaran el sueldo, con lo que se ahorrarían un dineral que podrían utilizar en no bajar el sueldo del funcionariado del susodicho Ministerio que no quiera aprender idiomas o, en su defecto, que mandaran un pellizquito para alquitranar la carretera de Miguel Esteban aunque fuera "a rodales". Mejor no sigo mirando el BOE que se me pone el trapecio derecho de "mu" mala sombra.
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