Una está acostumbrada a estar segura de la existencia del suelo que pisa pero comienza a dudar cuando recibe un comentario en el blog de fotos de El Toboso con el siguiente mensaje: "Este é o Toboso de D. Quixote? Existe mesmo?". Puesta en duda la "mesmida" del pueblo donde trabajo he salido a la calle a comprobar si había desaparecido y menos mal que seguía. Estamos acostumbrados a dar por ciertas muchas cosas y tenemos facilidad para pensar que nada de lo que viene en los libros es otra cosa que literatura (aunque algunos/as están buscando al Señor de los Anillos de esquina en esquina) y, claro, luego hay sorpresas y a la pobre Nádia Jururu, que así se llama quien ha incluido el comentario, se le aparece El Toboso de repente e incluso viendo las fotos duda de su existencia.
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